domingo, 15 de marzo de 2009

Unas cosas llevan a otras

Saint-Exupéry comenzó a trabajar para las líneas Latécoère en 1926. Esta línea aérea tenía entre sus objetivos establecer vuelos regulares entre Francia y África. En un primer momento se unió Toulouse y Casablanca para, a continuación, prolongar el trayecto hasta Dakar. En aquellos tiempos la vida de los pilotos era dura y los accidentes frecuentes. Debido a esto, pese al poco tiempo transcurrido desde 1919, en 1926 hubo que substituir a muchos de los pilotos veteranos. Saint-Exupéry formaba parte de la savia nueva.
Después de unos meses de aprendizaje, Antoine, a los mandos de un Bréguet XIV A2 nº215 F-AFEH, a las 6h 50m, inició sus vuelos como piloto de la línea entre Toulouse y Casablanca. Su primer trayecto fue Toulouse-Perpignan, llegando a transportar el correo entre Casablanca y Dakar. Un año más tarde, el director de la aerolínea lo nombró jefe del aeropuerto de Cap Juby, donde tuvo la difícil misión de mantener buenas relaciones con los representantes del gobierno de Madrid en el protectorado de Río de Oro, con los árabes insurgentes y, al mismo tiempo, asegurar la regularidad de los vuelos. Durante aquel tiempo escribió Correo del Sur.

Bréguet XIX, el avión de nuestro protagonista durante su paso por Latécoère.

1926, tan sólo 23 años después de los exitosos vuelos de los hermanos Wright en Kitty Hawk. Creo que es poco conocido que entre los pioneros de la aviación se encontraba Louis Bréguet. Este piloto e industrial francés, nacido en París en 1880 y fallecido en Saint-Germain en 1955, fue uno de los primeros pilotos y constructores de aviones del mundo. Tenía un gran interés por los helicópteros. Louis y su hermano Jacques Bréguet pasaron a la historia como pioneros de la aviación, ya que su aparato Bréguet l "Gyroplane No. 1" fue el primer giroplano tripulado e impulsado exclusivamente por un motor que logró elevarse del suelo, 60cm. Esto ocurrió en 1907, bastante antes de que entre 1920 y 1923, De la Cierva hiciese con sus autogiros algo más que elevarse del suelo.
Bréguet XIX, para grandes travesías (y aún hay quien se queja del Airbus A320)

Durante la primera guerra mundial, Louis construyó el Bréguet XIV, que contribuyó eficazmente a la victoria de los aliados. La construcción del Bréguet XIX permitió, después de la guerra, realizar grandes travesías, principalmente la primera, de Este a Oeste por el Atlántico Norte, protagonizadas por Cortés y Bellonte.

Este modelo tiene las clásicas agujas de la marca, por cierto, ampliamente imitadas.

Sin embargo, hoy en día se conoce más (es una forma de hablar) a la familia Bréguet por ser una familia de relojeros e inventores de origen suizo. El patriarca de dicha familia, Abraham Louis Bréguet (Neuchâtel 1747 - París 1823), estudió matemáticas y aprendió relojería en Versalles y Londres. De regreso a París, abrió un establecimiento de relojería. Inventó numerosos dispositivos, interesándose por los escapes, para dar a los relojes mayor precisión. Revisar el catálogo de clientes de Bréguet es definir el quién es quién en la historia de los últimos siglos. Otro asunto es que los usuarios de dichos relojes, aprecien el valor del descubrimiento científico, la ingeniería mecánica, la pasión por la perfección o la búsqueda de la aventura que ha caracterizado al menos a una parte de la familia Bréguet.

5 comentarios:

Mildolores dijo...

Mi desconocimiento sobre la materia es tal, que lo único que puedo decir es que lo he leido y que me ha parecido interesante.
Es curioso usar los blogs para ampliar culturilla general.
¡Para que luego diga mi mujer que entiende que entrene, como lo hace ella con sus maratones, pero que pierda el tiempo con los blogs!

Atalanta dijo...

Siempre me interesó el mundo de los pioneros de la aviación. Cuando me lea el libro que me recomendaste,hago una entrada sobre el autor y su derribo.
Un saludo.

Xocas dijo...

Mildolores, sin embargo mi mujer ha opinado que esta entrada ha sido árida (es decir, un coñazo). Yo no lo puedo evitar, me encantan los aviones, las historias de los pioneros y los relojes. No me he resistido a mezclarlo todo.

Atalanta, esa entrada la leeré con interés. No dejes de poner unas buenas fotos del P-38...

Jesús dijo...

Nda, nada, a mi me ha gustado.

Hablando de Saint-Exupéry, y de esos otros libros suyos. Me está costando un mundo encontra alguno de ellos editado e castellano.

Ha caído en mis manos "el aviador". Me parece fantástico. Buscaré "correo del sur".

Xocas dijo...

Gracias Jesús. La verdad es que los libros que tengo los conseguí hace bastantes años a través de Círculo.