viernes, 27 de abril de 2012

Furia

Cuando las cosas no salen. Cuando se acumula demasiado. Cuando se necesita una válvula de escape. Nada mejor que mirar al vaso desde el borde de la piscina y advertir al líquido elemento: hoy te toca a ti.
Tras las mejores series de 100 de este año y sin sentir los brazos. Me dispongo a inaugurar un fin de semana espectacular (al menos, esa es mi intención).

Nota a pie de entrada: hoy me preguntaron si ayer estaba nadando a mariposa en la piscina. ¡Si supiera! Y eso que es fácil reconocerme.

miércoles, 25 de abril de 2012

Coincidencia

Es fácil de adivinar de quien me he acordado esta mañana.

martes, 24 de abril de 2012

Conociendo a gente

La semana pasada invité a cenar a unos clientes. En total éramos cinco: un tipo normal. Otro que montaba en monociclo y lo consideraba una habilidad básica que sus hijos tuvieron que aprender. Un campeón de ping-pong. Un tipo aficionado al freeride, y al culturismo también. Y, además, un aprendiz de triatleta. Supongo que el tipo normal se encontraba raro... para variar.
Entramos en el coche, puse la radio y sonaba el Starway to heaven. Comentaron entre los dos más jóvenes:
- ¡Qué bueno! ¡Led Zeppelin!
- No sé quienes son.
- ¿Cómo?
- No son de mi época.
- ¡Hombre! Decir eso es como decir que Mozart no es de tu época.

La frase me impresionó. La verdad es que no se puede negar que la canción es un auténtico clásico y la banda también.

Hoy he estado en Lisboa y me acordé de esta pequeña anécdota porque conocí a otro tipo curioso. Trabaja en Lisboa en una empresa que nada tiene que ver con su negocio familiar (que yo sepa). Le pregunté por como se pronunciaba su apellido y después por si tenía algo que ver con la familia en cuestión. Pues sí. Nos pusimos a hablar y, de verdad que no lo forcé, resulta que había hecho un Ironman: 10h45min en Niza. Uno y no más. Consiguió la medalla, disfrutó del evento y quizás repita, quizás no.
Puede que esto haga bueno el dicho de "no somos nadie", pero... me he picado. En cuanto se despeje un poco este berenjenal que me tiene preocupado...

jueves, 19 de abril de 2012

Influencia


Al ser padre o madre se asume una responsabilidad mayor de la que uno puede alcanzar a comprender en un primer momento. La tarea es un desafío y, al mismo tiempo, magnífica y hermosa. Se influye en las pequeñas cosas y se influye en lo que de verdad importa.


Gracias Pablo por descubrirme el vídeo.

martes, 17 de abril de 2012

En modo entrenamiento

En modo entrenamiento cualquier sitio es bueno para ejercitarse. Conduciendo por la autopista, los caminos de servicio son rutas para la bici de montaña. Aquella subida sostenida en una carretera secundaria, el lugar ideal para hacer un buen entreno de cuestas. El paseo marítimo es un placentero recorrido para los rodajes de recuperación. Las piscinas están todavía cubiertas, pero uno se las imagina repleta de bañistas entrenando sin descanso.
Lo malo es volver a la realidad. Aparcar el coche y dejar esos microsueños...hasta la hora de entrenar.

domingo, 15 de abril de 2012

El Peseta

Salí de Vigo en la bici en dirección a Nigrán por la carretera interior. De ahí a Gondomar y subida al alto do Couso. El cielo parcialmente cubierto, temperatura un tanto fresca, pero bien, disfrutando de la salida. Y pensaba en lo que cuestan las zapatillas, lo que cuenta la publicidad, lo que nos dejamos "engañar".
Y me acordé de Alberto, el Peseta. De aquella vez que llegó a clase con su nuevas Adidas, creo que las de la foto de arriba. Por un tiempo fue la estrella de la clase, y del internado. Quizás no fuese un gran jugador de baloncesto, pero llevaba las mejores zapatillas, al menos las más caras. Personalmente me gustaban más las Air Jordan, pero sin duda, las Adidas eran más exclusivas. Él era feliz con ellas.
Esto debió de suceder en el 87. Aquel fue el año en que empecé a tener trato con él y jugamos innumerables partidos de baloncesto y salimos no pocas veces en bici.
Apenas tres años después, en una salida ciclista en la que no participé, alcanzó a un camión tras una curva ciega. Eran los tiempos en los que no se llevaba casco. Golpeó la cabeza contra la carretera y entró en coma. Murió unos días después. Aquello fue un shock tremendo. Durante años, me acordé de él todos los días. La vida es así, ni es justa ni tiene sentido. Así que, cómo criticar gastar un dinerillo en un capricho, si no haces daño a nadie y eso te hace feliz.

Pero la naturaleza no estaba para que me dejase llevar por estos pensamientos. Un buen chaparrón y viento en contra, seguido de otro buen chaparrón y más viento en contra, machacaron la última hora de mi salida ciclista. Con una media de risa, llegué a casa destrozado tras poco más de dos horas y media. Para redondear el día, media horita de carrera a pie en transición, aseguró que no podré moverme en lo que queda de día. Me voy a estirar.

sábado, 14 de abril de 2012

Como un triatleta con zapatillas nuevas

Una entrada express para reconocer que quizás me haya equivocado. Tenía vetada a Adidas y ayer el tendero, un atleta como la copa de un pino, me convenció de llevarme unas Adidas Supernova Glide 4. La compra tuvo su momento. Llevé mis viejas Mizuno Nexus 4 para que pudiese ver como desgastaba las zapatillas. Siempre he leído que es una buena práctica y ayer... la puse en práctica. El hombre tomó la zapatilla y, aparentemente sorprendido, me dijo que pisaba como un profesional, porque apenas tenía desgastado el talón y sí mucho la parte delantera. Casi le doy un abrazo. Después le dije lo que era obvio, que debía ser lo único que podría tener en común con los pros, mientras hacía lo posible por aguantarme la risa floja. En fin, siempre se agradece un poco de pelotilleo, si es breve y controlado.
A lo que iba. Hoy las he estrenado. Según el GPS, 16,5km en una hora y veinte minutos. No sé si estará bien medido, a pesar de que fui por un lugar despejado. Las sensaciones, buenísimas. Me gusta mucho su amortiguación y la comodidad de su interior. No me gusta tanto que las he notado algo inestables en curva y no acaban de ajustar bien alrededor del talón. En todo caso, si estas sensaciones se confirman, no acaba 2012 sin que me compre las Adizero Boston.

lunes, 9 de abril de 2012

Campus de entrenamiento Ribadavia2012

Aunque no llegué al nivel de la pasada Semana Santa, quizás porque cayó más temprano este año, la pasada ha sido la semana de mayor volumen en lo que llevamos de año. El resumen es fácil. Lo positivo es que noto que voy ganando forma semana a semana. Lo negativo es que llevo ya unas semanas con unas molestias por las pantorrillas. A ver que opina el fisio el jueves. Mientras tanto, toca seguir afinando en todos los sentidos.Y, a pesar de que no es lo usual en este blog, vamos a detallar un poco qué fue lo que hice.
Lunes. 40 minutos de carrera continua. Abdominales y estiramientos (esto mejor ya no lo detallo, porque es siempre igual). Sensaciones dignas para algo menos de 8km. Empezaba bien.
Martes. Día de descanso. Me vino estupendamente, ya que salí de casa temprano y regresé a las diez de la noche.
Miércoles. Nos vamos a Ribadavia. Tras rematar la jornada de trabajo, con la familia y los bártulos emprendemos el corto viaje. El rarito se para en A Cañiza para realizar el entreno de natación. Allí me entero de que la piscina no abrirá el sábado por lo que es seguro que perderé un entreno. Realizo mis 2.100m con ejercicios variados (incluyendo los lentísimos largos de patadas, un horror) en poco más de una hora.
Aprovechando el desnivel, negativo (menos quinientos y pico metros), me subo a la bici para pasar media horita de frío. Fue un buen aviso de lo que vendría después. Como anécdota decir que al llegar a casa la calefacción no funcionaba y el agua caliente, tampoco. Al menos en uno de los dos pisos. Después de unos tres cuartos de hora conseguimos encender el termo del primer piso. Como estaba negro, aproveché para sacar unas pelillas grabando un anuncio.


Jueves. Después del paseíto de una hora con la directora deportiva, me decidí a entrenar. Una hora de carrera incluyendo ejercicios de movilidad articular, técnica de carrera (de esto no tengo video, afortunadamente) y unas series. De postre una hora de ciclismo.
Viernes. Hora y media de bici bajo una lluvia incesante. Mis pronósticos no incluían este fenómeno meteorológico. Así, con solo un chubasquero, llegué a casa calado hasta los huesos. Para entrar en calor, me regalé veinte minutos de carrera a pie en transición.
Sábado. Cansado de tanto variar. Realizo 80 minutillos de carrera a pie. Con varios cambios de ritmo, fue el mejor rodaje de 2012. Las cosas empiezan a marchar.
Domingo. Ya de regreso en la California gallega, emocionado por un día de sol y más de quince grados de temperatura, salgo con la bici para completar tres horas de bici y subir algún que otro alto. Con sensaciones pésimas de inicio, voy encontrándome mejor progresivamente, acabando muy entero con menos de un litro de isotónica y un plátano.

Así, he completado algo más de diez horas de entreno: 2,1km de natación, 149km de ciclismo y 34km de carrera. No es que sea ninguna maravilla, pero a mí me valen estas cifras. Empezamos con alegría la primavera.

PD: En cuanto tenga un ratillo, recopilo unas fotos y cuento algo de un viaje a Finlandia que hice hace unas semanas.