Me he resistido todo lo que he podido, pero no siempre se gana. En fin, una responsabilidad más, esperemos que un amigo más también. Confío en que mueva la colita como si fuese el primero cuando entre con los de cola del pelotón. Por cierto, se llama Tri.
11 comentarios:
jajaa espectacular TRI!!!
yo tengo un gato que rescaté de la calle moribundo (y no me gustaban los gatos), se llama jarryto.
son buena compañia.
un abrazo
Je, je, je.. no te arrepentirás. Quién sabe sino será compañero tuyo de entrenamientos de carrera.
Hola Tri, bienvenido.
Bienvenido Tri!
Tri: Guau, guau, wow-guau (gracias a todos, bien hallado).
Xocas: No creo que me arrepienta, me gustan mucho los animales. Aunque habrá que esperar para saber si le gusta correr o no ;-)
Pues llevatelo a correr que suelen aguantar bastante. Que bonito!!!
Leí, hace ya slgunos meses, El niño con el pijama de Rayas y la verdad es que me impresionó y me dejó una huella profunda ahí donde las emociones se sienten con gran intensidad. Nos seguimos leyendo, un abrazo.
Asier, habrá que darle un tiempo, pero le daré la oportunidad.
Manuel, el libro me gustó, es bueno, pero todavía prefiero en este estilo el Diario de Ana Frank.
Por supuesto, yo también. No hay ninguna duda. El de Ana Frank está escrito con los sentimientos a flor de piel y con la memoria ultrajada y maltratada. Es ella la que escribe, es su propia vida la que desnuda ante la página en blanco. El niño con el pijama de rayas sólo es literatura, una novela bien escrita. El Diario es la vida misma escrita y vivida desde el sufrimiento y eso se nota y se mete dentro de la piel más honda cuando uno lo lee. Me gustaría seguir hablando de libros contigo, pero sería muy extenso. Poco a poco nos podemos intercambiar títulos que nos parezcan interesantes. Saludos y un abrazo.
Totalmente de acuerdo Manuel.
Enhorabuena por el amiguete. Y mola el nombre. Jejeje!!!!
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