Fin de año 2008

Hoy es uno de los días más raros del año. En realidad, no acaba nada. O sí, la cuenta de este año. Pero, después de todo decir que el año acaba hoy o mañana es arbitrario. Sin embargo, el haberlo decidido lo hace especial y da pie para poner en marcha buenas ideas.
Así, hoy correré mi primera San Silvestre en Castrelo de Miño. La emoción de participar en estos eventos tan deportivos como lúdicos ya merece la pena el día. Después, la despedida del año en familia, las uvas y la sensación de que se tiene una nueva oportunidad. ¡Y siempre se tiene!



¡Feliz 2009!

La invitación

Me invitaron a comer en compañía de unos conocidos que me eran simpáticos. El menú era bueno. Es más, siempre quise degustar un menú de aquel restaurante tan premiado por la guía roja. Claro está que las alcachofas no son santo de mi devoción, pero aún así, apetecía.

Al acercarnos al restaurante, mi acompañante me dijo que dudaba en si llamar a su amigo y decirle que no viniese, pero que debería decidir con él. Después me advirtió de que quizás tuviese que fregar si no era capaz de pagar la invitación del grupo. Me he quedado a la puerta del restaurante dudando entre si era una broma pesada o una oportunidad de comer como nunca, aunque estaba claro que fregaría al final. Mañana entraré por la puerta de la cocina, aunque no he podido dejar de pensar en las vacaciones.

El día se completó con un entreno de carrera a pie de poco más de 7 km.

BTT mixto

Mixto porque hoy tocó andar (hasta escalar) tanto o más que pedalear. Ayer me lié viendo rutas aquí y aumentaron mis ganas de ciclismo montero. Así que hoy salí con la dama de hierro al monte:

La dama de hierro

Tras 2h42min (1.535kcal, 132ppm de media), me dio tiempo a coronar el Galiñeiro Norte, a perderme, a disfrutar (sin duda) y a llegar a las 16h para comer. Es decir, pagué la inocentada por hacer una ruta por primera vez y solo (lo que es habitual en mi caso). A continuación, algunas fotos tomadas en lo alto del monte.

El embalse de Zamáns
Mirando al este (más o menos)

Mirando hacia el sur (otro día me veré las caras con el Aloia...)

Las Islas Cíes al fondo

Un comienzo

Después de meses pensándomelo, he decidido arrancar con mi propio blog. Mi intención no es otra que recoger algunos pensamientos, entrenamientos y, con suerte, conocer a otras personas. Sin embargo, no dejo de pensar que esto es meter un mensaje en una botella y después lanzarla al mar (tendido y mudo, en honor tuyo, está el mar).
Por la lista de los blogs que sigo, están claras mis aficiones deportivas, las que más me motivan. Claro que mi nivel es otro. De hecho, he estado en un "tris" de llamar a mi blog "O caracol do Ribeiro", como contrapunto al de Furacán. También he valorado una entradilla del tipo "no hay límites" como la del admirado Josef, pero mis límites siempre están bien presentes.
Y creo que esto no es malo.