Cambio de bici

Estoy considerando el cambio de mi bici de carretera. No es que necesite mucho más de lo que tengo, para mi nivel de "paquetería" es suficiente. Pero ya me pica que sea "full steel" y tenga quince añitos. Aunque podría decir aquello de que "quince, la niña bonita". Por otra parte, tal y como están las cosas, también es posible que a última hora decida tirar una temporada más con lo que tengo, haciendo caso omiso a las recomendaciones del presidente del gobierno.

Así que estoy inmerso en un mar de dudas. Esto tiene su parte positiva, me encanta leer y releer los catálogos, ver las especificaciones, las formas, los colores y hasta la luz de las fotos. Es estupendo el olor de algunas de las tiendas e imaginarse sobre todas y cada una de las bicis.

En fin, vayamos por partes. Si alguno de los que tienen a bien leer estas líneas quiere opinar, está expresamente invitado y se agradecen los comentarios (Anónimo: Compra la azul de kevlar. Xocas: Será de carbono, ¿no?; A: Eso, de acero; X: De acero es la que tengo; A: Entonces, ¿para qué quieres cambiar de bici?; X: Porque es pesada y me fastidia tener un plato de 52 y otro de 42; A: No te sigo, ¿vas a comer o a correr con ella?; X: Oye, ¿tú que sabes de bicis?; A: Nunca dije que fuera piscis).

Utilizaré la bici para entrenar (casi siempre), participar en alguna marcha cicloturista (ocasionalmente) y competir (me saltan las lágrimas de la risa con mi nivel competitivo, pero lo cierto es que espero poder correr con ella en un futuro...pues eso, en un futuro).

Todavía dudo si comprar cuadro de carbono o aluminio.

De aluminio:

Trek 1.9 (la más barata)Giant Defy 0 Triple, esta viene con triple plato y creo suficiente un par.

Cervélo S1, aunque esta última me parece cara o excesivamente buena para mí, todavía no lo sé). ¿La más bonita?

De carbono:Specialized Tarmac EliteScott CR1 TeamTrek Madone 4.5.
Giant TCR Advance 2 Compact

Si considero el trato recibido en la tienda tendría que incluir en la lista a Orbea y Lapierre, además de Specialized. También puede ocurrir que decida en base a criterios objetivos, el menor precio, o subjetivos, la más bonita. Me temo que tardaré unas semanas en decidirme...

Tiempos de crisis

Escribo esto pensando en aquellos empresarios que deberían saber y no saben. En los mezquinos que deberían de prever y no lo hacen. O los que deberían ser valientes al decidir y prefieren ser meros borregos. También me acuerdo de los que realmente sufren la crisis por la ineptitud de aquellos que no sufren sus consecuencias.

Al menos, hoy he visto evidencias de que las cosas empiezan a mejorar. A ver si es cierto.

Esta entrada se la dedico a mi suegro.

Visualizando...

El año pasado completé la Vig-Bay sufriendo mucho durante los cuatro últimos kilómetros. Por si fuera poco, me hice daño en el hueco poplíteo y no pude correr normalmente durante varios meses. Echando la vista atrás he comprobado que cometí varios errores. Acumulé pocos kilómetros, entrené mucho de noche por lo que acusé el calor que hizo durante la carrera. Y no comí nada durante la competición.

Por el paseo de Bouzas

Este año me encuentro mejor. Estoy corriendo menos, pero a cambio, me subo más a la bici, nado más y hago más gimnasia. Exactamente, llevo dedicado un 49% más de tiempo al entrenamiento que el año pasado, a esta fecha. Por tanto, espero hacer una carrera mejor.

Correremos por la carretera de la costa.

Dentro de mi modesto y poco coherente plan de mejora, hoy tocaba una tirada larga. La he realizado por un recorrido plano, a pleno sol, 16,5km y al ritmo objetivo de carrera. Lo mejor es que me he sentido estupendamente al llegar a casa. Eso sí, algo cansado y acalorado. Esto último lo he solucionado con un litro de bebida isotónica.

Me veo corriendo bajo el sol, a ritmo cómodo y constante, llegando a Bayona entre la afición.

¡¡¡ VAMOS !!!

Hoy iba a ser un desastre de día. Casi siete horas de coche, problemas con lo que me traía entre manos y problemas que llegaban desde la oficina. Todo salía al revés. He llegado al hotel con la sensación de que el día se había ido al garete y dando por bueno únicamente el desayuno. El zumo, café y tostadas con la mejor compañía.

Tenía el estómago revuelto y me encontraba cansado. Me acerqué hasta un centro comercial y compré una tarjeta de 2GB para el móvil nuevo. Lo cargué de canciones y me fui a entrenar. Fue la primera vez que corrí escuchando música. ¡Increíble! ¡Qué subidón! Ahora me explico porqué tantos corredores llevan sus auriculares durante las salidas.

Los Andes

Después del My Way los problemas desaparecieron. ¡Tantas cosas por hacer y yo preocupado por un día ya vencido! Llegué al paseo del Espolón y estaba volando. Escuchando Freedom! '90 me recordé escuchando esta canción de Talca a Rancagua y de Talca a Concepción, en Chile. Que diferente es la vida aquí y allí. Hasta entrenar era diferente. Ese fue un viaje auténtico, no estos desplazamientos un tanto alocados.

El Pacífico

Mañana a por todas. A trabajar con ilusión y a última hora despediré el día con 9x400m+abdominales+estiramientos+jacuzzi.

Corriendo en Porriño

¡Buen fin de semana! El sábado una hora de carrera a ritmo suave por la ciudad, pero buscando el mar. Me crucé a bastantes corredores, a turistas portugueses y hasta a unas piragüistas que entrenaron por la ría. El día olía a deporte popular (las nubes, no sé a que olían). Por la tarde nos fuimos a Porriño a recoger el dorsal de la Interrunning 2009. Después, a Tui, qué recuerdos los del cuadriatlón del año pasado, con los ojos en la competición y los oídos atentos a lo que contaban por la radio de la crono del Tour.

Pero el domingo fue el día de las carreras. Carrera para prepararnos y llegar a tiempo a Porriño y el 10.000m de la carrera a pie. Cuatro vueltas a un circuito urbano prácticamente llano. Mi intención era realizar un entrenamiento de calidad pensando en la Vig-Bay y bajar de los 50 minutos.

La salida fue un poco pesada, tuvimos que esperar un buen rato a que todo el mundo estuviese correctamente colocado. Lo curioso fue que esperando a ver si salíamos o no me fijo en un tipo con una camiseta azul en la que dice "Grimo". ¡Anda!, mira que casualidad, un compañero de bloguerías. Sin perder tiempo, que es oro y todo eso, me presento. Un gusto conocer a una persona tan maja y que además divierte cuando escribe. Espero que coincidamos en más ocasiones.

¡Allá vamos!

Se da la salida y nos lanzamos... a andar. En cola de pelotón, desde que los primeros arrancan a correr hasta que los últimos pasamos bajo el arco de meta, casi va un minuto. La primera vuelta de reconocimiento, mantengo el ritmo fácil un poco por encima del objetivo. La segunda comienzan a doblarme, pero yo a mi aire, no me queda otra. Durante la tercera me saluda una compañera de trabajo, es lo que tiene correr en el pueblo en el que está tu empresa. También me dobla el tipo que me vendió las zapatillas. Ligero como una pluma. ¡Y yo que pensaba que sólo se dedicaba a la bici! La cuarta decido apurar un poco y rebajo en 45 segundos los tiempos de las vueltas anteriores. Finalmente, el tiempo real queda en 49'10''.

Si ya se me veía muy relajado...

Las féminas de la foto anterior miraban a este conductor sin carné

Lo malo: me he quedado con la sensación de que debería haberme exprimido un poco más. Ya tocará. Lo mejor: conocer a Grimo, el buen ambiente de la carrera, correr en un día tan bonito.

Foto final con Grimo. Por cierto, no nos despedimos: ¡Hasta otra!

Fin de semana lucense

Este fin de semana nos fuimos a Lugo, así que tocó entrenar allí. Primero pateé todo un monumento nacional: 40 minutos de carrera por la muralla de Lugo. Eso fue el sábado y fue una pena que no llevase el móvil conmigo, porque hay lugares bonitos para quitar fotos. Por otra parte mejor, evité salirme del camino marcado.

El domingo, todavía mejor. 80 minutos de carrera continua a ritmo suave para ganar fondo. Hice el recorrido por el paseo fluvial que va desde la estación de ferrocarril hasta el río Miño (lo he comprobado, me quedé a 300m del río, me pasa por no conocer la zona). Me ha gustado mucho el recorrido. Estrecho para hacer en bicicleta de montaña, pero muy bueno para correr, o pasear.

Aquí, unas fotos.

¡Qué toque impresionista! Se percibe el movimiento del agua, huele a tierra mojada, a barro y piedras, a que el que quitó la foto iba corriendo


De regreso. Lo que se ve al fondo es una cafetería (quizás un restaurante)

Cascada hacia el final del paseo. Bonita, ¿verdad?

Autorretrato de estilo cubista. Otro día colgaré algo más naturalista, pero el resultado no será mucho mejor.

Nota 1: Esta vez no fui de hotel, afortunadamente. Compañía agradable y cariñosa+cocina estupenda+buenas zonas de entrenamiento=habrá que pensar en si hacer o no el ridículo en el duatlón de Lugo.

Nota 2: Tengo que volver al fisio uno de estos días, persisten las molestias en la pierna izquierda.

Nota 3: ¿No habíamos quedado en que no iba a llover más y este país iba a ser un desierto? Hace unos días ya dijeron que este es el invierno más lluvioso de los últimos 6 años. Supongo que les daría igual decir 6 que 60. Quizás falte algo de rigor en estas afirmaciones...Pero empiezo a saturarme de tanta lluvia, temporal, frío y nieve. No hay aterrizaje tranquilo ni entrenamiento en el que no me ponga perdido (apenas he exagerado un poco).

La primera del año

En Porriño, el próximo 15 de febrero estrenaré el año con la primera carrera popular. 10km para ir haciendo boca y con la Vig-Bay en mente. Ya me veo con el dorsal en el pecho, calentando suavemente antes de la carrera, en la salida a cola de pelotón. Se da la señal y salgo a toda pastilla


Esa no es mi moto y ese no soy yo, pero la ilusión cuenta

y llego como llego. Me lo voy a pasar pipa.


Haciendo la señal de la victoria tras cruzar la línea de meta

Trataré de hacer un tiempo igual o inferior a los 50'.

Tri-deporte

Desde ayer estoy de mini-ruta, así que practico una variante del triatlón, "o triatlón do Xocas", que consiste en volar, literalmente, conducir un coche y practicar algo de deporte hacia el final del día. Así, ayer volé de Vigo a Bilbao, recogí el coche de alquiler y ya en la transición, la primera sorpresa. No había coches de la categoría con la que suelo moverme, así que me dieron uno de categoría superior. Estando como estaba en Bilbao, esto se entiende como "si no tenemos un León, pues te llevas el BMW".

Primera etapa superada. Por lo menos no llovía


¡Qué suerte! Con lo que me gusta conducir

La ruta fue variada. Primero a Zamudio, después a Llodio (ese pueblo en el que algún municipal se toma un tiempo fotografiando al bicherío de la zona, cosa que por cierto me entretiene mucho), finalmente a Zumaia dando un rodeo por San Sebastián y Zarautz, porque no hay viaje en el que llegue a todos los destinos a la primera, a veces ni a la segunda.

Fin de trayecto: Zumaia. La carretera de la costa maravillosa

Para finalizar el día, 45 minutos de carrera, cambiando de ritmo en mitad del entrenamiento. Después de medir la distancia en Google Maps me he llevado la sorpresa de que hice más distancia de lo previsto y con sensaciones bastante buenas. Por lo tanto, me he autoconvencido de que ya puedo hacer un 10.000 en 50 minutos o menos (para mi, una proeza). No veo el momento de ponerme un dorsal y salir con el cuchillo entre los dientes. A ver si así no tropiezo con los de cola del pelotón.

A lo que sí le llevo dado muchas vueltas, es lo que tiene viajar solo, es que el deporte popular es un buen indicador del nivel de vida de los pueblos. En Chile y México no recuerdo haber visto correr a nadie, aunque me consta que sí hay afición, pero menos. Sin embargo, estos días me he hartado de ver corredores, ciclistas, piragüistas y hasta a algún osado parapentista.

Ahí desayuné hoy, mientras comprobaba el correo y leía unos documentos. Mi oficina no suele ser tan bonita


Como en la bici, hay días que las "piernas" no van

Hoy sin embargo, tocó duatlón. Primero coche (Zumaia-Bergara-Pamplona) y después carrera, complementada con unos tres cuartos de hora de gimnasia y estiramientos. Mañana, triatlón inverso (finalizando con el maratón de la T4).