jueves, 22 de octubre de 2009

Arrieros somos...

Arrieros somos y en el camino nos encontraremos. Hace ya más de diez años que sucedió y hoy ese viejo recuerdo, malo, me volvió a visitar. Salía de la sala del café y lo vi muy de pasada, pero lo reconocí. Caminé hacia la oficina, paré, lo miré bien y continué. Como decía Cándido "quieto hasta ver".
Ya es un hombre mayor, de hecho ya lo era cuando me hizo aquella judiada, y a mí me aplicaba lo de joven e inexperto.
Es uno de los prohombres de Vigo, con su doctorado y su cátedra y sus cincuentamil títulos y puestecillos, bastante conocido en ciertos círculos. De los que sale en las televisiones y periódicos locales, algunas veces en los regionales. Siempre presentando sus estudios que hacen otros y opinando sobre la situación.
Hoy apareció por la empresa y me he dado cuenta de que casi mejor que no nos presenten, otra vez. Y es que a esta gente que tanto se aferra a sus puestos, sus laureles y los dineros, les cuesta mucho parar. Y claro, de tanto tentar la fortuna, de vez en cuando les tocará oir lo que no esperan. Porque a éste se la tengo guardada y el día que lo tenga a tiro le voy a decir cuatro cosas muy claritas. Nada más, sólo por agriarle el día, que se lo merece.


Por cierto, Cándido era uno que estaba hasta el gorro de que sus varios jefes le dieran órdenes contradictorias, así que ya nunca hacía nada a la primera. Cuando alguien le preguntaba "¿por qué no empiezas el trabajo?", siempre contestaba "quieto hasta ver". Así que sólo empezaba algo cuando recibía la misma instrucción varias veces.

6 comentarios:

Grimo runner dijo...

Que miedo das cuando te enfadas compañero. Un abrazo.

davidiego dijo...

cada terruño tiene su cacique y espero que la devuelvas bien dada, tiempo has tenido de madurarla...

Mildolores dijo...

Eso, eso. Y cuando se produzca tu venganza nos la cuentas.

Risco dijo...

No caigo.
Le he dado vueltas pero nos das muchas pistas.

Atalanta dijo...

Después de conocerte, no te imagino así enfadado de verdad... menuda te la tuvo que preparar. Aquí nos quedadmos, quietos hasta ver si un día te quedas a gusto y nos lo cuentas.

Xocas dijo...

Grimo, que va, que va. Realmente, me enfadé hace tiempo.

Davidiego, sí, siempre hay aprovechados. Realmente, me conformaría con meterle un poco el dedo en el ojo, no estoy para amargarme más de lo imprescindible.

Mildolores, lo dicho. Y estaría bien poder contarlo.

Risco, claro, imagino que varios pueden encajar.

Atalanta, je, je. Pues en casa sí me imaginan y sí la preparó. De hecho ayer entré en casa y con decir que vi a alguien, me paré y pensé que mejor seguía mi camino, ya supieron a quien me refería.