Este año los Reyes me trajeron un pulsómetro y con él venía una participación para el sorteo de unas plazas en la edición 2010 de la Titan Desert (ya sabéis que pulsómetro tengo, mucha máquina para el menda). El caso es que no por ser 500km, por el desierto, en cinco etapas, iba a dejar de concursar.
Esta semana recibí un correo en el que vi escrito Vigo antes de ser capaz de leer otra cosa y pensé: ¡la he armado! Pero no, había un afortunado en la ciudad y no era yo. Bien pensado, es para creer que Dios existe y vela por nosotros, porque si gano la plaza voy. Quizás no hubiese sido muy juicioso. ¡Aleluya! (Y que pena que no me haya tocado.)
En otro orden de cosas, hoy fue la última clase de natación y en el variado tocó un ejercicio que dudo repita en la piscina municipal. Una lástima porque me gusta mucho. Nadar a tope un largo, salir de la calle, lanzarse de nuevo a la piscina y a tope hasta el otro extremo de la calle. Cansado pero divertido. Un poco notas en una piscina en la que, si equivoco el cálculo, podría acabar partiéndole la espalda al que va a hacer rehabilitación. Un detalle de mal gusto, sin duda.
7 comentarios:
Bueno, pero algun dia seguramente estarás en esa carrera!
Un abrazo
No es que sea un detalle de mal gusto, es que puede resultar un pelín molesto.
En fin, lamento que no te haya tocado. Me hubiese encantado leer las crónicas del Xocas en la Titan Desert.
Que lastima !! yo me muero de ganas por ir pero los 500km no son problema....son los xxxx€!!!!! que vale....
Un saludo !
lástima, te puedes preparar la Gigante, en vez de arena del desierto tienes todo el barro de la comarca. A lo mejor se pone de moda.
suerte en la próxima.
Hosti, tú, eso del Titan Desert hubiera sido la pera...
Que pena de no poder leer esa cronica colega, tendria que ser la repera,en fin mas palante sera no?.
Saludos mostro.
Gracias por vuestros comentarios. Hubiese sido una locura genial.
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