Escribo esto pensando en aquellos empresarios que deberían saber y no saben. En los mezquinos que deberían de prever y no lo hacen. O los que deberían ser valientes al decidir y prefieren ser meros borregos. También me acuerdo de los que realmente sufren la crisis por la ineptitud de aquellos que no sufren sus consecuencias.
Al menos, hoy he visto evidencias de que las cosas empiezan a mejorar. A ver si es cierto.
Esta entrada se la dedico a mi suegro.
7 comentarios:
no sé a qué se dedica tu suegro pero tienes razón, con cabeza, pero hay que seguir consumiendo.
Mi suegro ya está jubilado, pero fue director comercial. Durante la crisis del petróleo, cuando la fuerza de ventas de su empresa lo veía negro, les distribuyó el cuento de la entrada. La verdad no sólo está en lo que se lee en los periódicos o ve por TV (como bien sabemos).
No está nada mal el cuento, no.
¡Cuanto de cierto hay en él!
Que razon tiene la imagen esa.
Me ha pasado tu blog nuestro amigo común "MILDOLORES" a cuento de lo de la crisis, y he de darte mi enhorabuena. No se puede plasmar con mayor acierto Xocas.
Te seguiré leyendo.
Un abrazo desde Málaga.
Gracias por venir Curro. Me he pasado por tu blog, enterándome de los 101km previstos para un solo día de mayo. ¡Qué pasada! No sabía de esta prueba. Seguimos en contacto bloguero.
Los de los 101 Kms es una pasada. A mi me han hablado mucho de esa prueba, pero procuro no escuchar demasiado... por si acaso me da otro cruce de cables.
Me ha gustado la entrada. Yo creo que este efecto psicológico de la crisis, el miedo a la crisis, es mucho mayor de lo que se reconoce.
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