domingo, 10 de octubre de 2010

Paseo junto al río 2

De nuevo salí a pasear junto al río. Una semana después en mejor compañía, esta vez éramos tres. Hablando de todo un poco y haciendo algún que otro pequeño plan. Finalmente, ya tengo claro que quiero pedirle a 2011, deportivamente hablando y salvo que cambie de idea a última hora.
¡Ya tengo a todo el mundo convencido! (o me han dejado por imposible)

Mi entrenador, el Xocas, no está nada convencido pero tengo mano con él. La directora tampoco cree que todos los objetivos sean razonables, pero ya sabe que no hay mucho que rascar.
Una pedorreta para los miedos, los problemas y los amargados

Mientras tanto, en dos semanas acumulo una sola sesión de entreno, dos bodas y una sesión de fisio, por aquello de ver como estaban las rodillas. Así que eso de perder la forma para volver a subir un peldaño la próxima temporada, está asegurado. Bueno, al menos está asegurada la pérdida.
¡¡¡Cogiendo impuuuuuuulsooooo!!!

Ahora toca ir poco a poco entrando en materia. Sin prisas, pero sin pausa.
Lo mejor es recorrer el camino acompañado

4 comentarios:

davidiego dijo...

son secretos esos proyectos?

dos bodas, importante desgaste del sistema digestivo y económico, casi se puede considerar un ultra...

Furacán dijo...

Vendrás al Leironman no?

Atalanta dijo...

Corriendo por el río he estado yo también esta mañana y hasta me he bañado. Bueno, bueno, me dan ganas de apostar por cúal será uno de esos proyectos ¿un B? Oye, vaya barbas... ¿no te echa la bronca la directora?

Xocas dijo...

Davidiego, uno sí y el otro no y ya que lo preguntabas escribí la entrada siguiente. De desgastes post-boda no me hables. Acabé muerto.

Furacán, también contesto a tu pregunta en la siguiente entrada. Muy a mi pesar creo que tendré que decidir y no sé que voy a elegir.

Atalanta, caliente, caliente. En cuanto a las barbas, te diré que la presión familiar es casi insoportable. A ver si aguanto unas semanas más.