viernes, 30 de octubre de 2009

Piensa como un abejorro, entrena como un caballo

La frase la he leído en The triathlete's training bible de Joe Friel (si todavía hay alguien a quien le interese el entrenamiento y no sigue su blog, quizás debería pasarse por él). Intentaré que sea mi lema para 2010.


Aquí las conclusiones más actuales del estudio.

Al parecer hace unos años los científicos de la NASA se interesaron por el abejorro. Este insecto tenía que encerrar algunos interesantes secretos sobre el vuelo. El abejorro tiene un cuerpo relativamente grande y peludo, y unas alas pequeñas. Además, su posición de vuelo es muy poco aerodinámica. Sin embargo, se puede elevar considerablemente y volar. Después de muchos estudios, hipótesis, conjeturas, análisis, disecciones, grabaciones, mediciones, observaciones, comparaciones y discusiones, la conclusión a la que llegaron los científicos es que el abejorro no podía volar. Afortunadamente, nadie se lo dijo al abejorro y éste sigue volando de un lado para otro como si tal cosa, ignorante de su incapacidad.



Por otra parte tenemos al caballo de carreras. Los caballos de carreras entrenan de forma similar a los atletas. Emplean el entrenamiento de resistencia, las series, los monitores cardiacos, cuidan la alimentación y el descanso...sin embargo, la psicología del caballo de carreras es distinta a la del corredor. Un caballo no cuestiona lo que le dice su entrenador y sigue al pie de la letra sus instrucciones. No corren unos pocos kilómetros de más por si acaso. Cuando compiten, no sobreestiman a sus rivales y su único objetivo es ser los más rápidos.

Pues de eso se trata, pensar como el abejorro, tener confianza en uno mismo, y entrenar como un caballo, con un objetivo claro, de acuerdo con el plan establecido y sin cambiar de rumbo continuamente.

Nota1: Será un gran paso en relación con este año en el que pensé como un abejorro (uno es que no da para más) y entrené como un abejorro.
Nota2: Además, ya sé que funciona. Cuando tenía diecisiete años el psicólogo del colegio me intentó convencer de que no estudiase una ingeniería: "muy difícil, por encima de tus capacidades..." Evidentemente no le hice ni caso (ahí sí que apliqué bien el lema).

13 comentarios:

Jesús Carlos dijo...

Buenas. Muy buen ejemplo, el cual se puede recordar muchas veces a lo largo de la temporada. Saludos y a seguir entrenando.

Atalanta dijo...

Está muy bien la historieta, curiosa e interesante. Te veo muy motivado para la nueva temporada. Tú tienes pinta de ser muy metódico. Ya verás como rápidamente notas los progresos.

Risco dijo...

Así me gusta, defendiendo a los animales grandes y peludos.
Gracia tío

Furacán dijo...

Muy bueno. Míralo por el lado bueno, ya cumples con el 50%, ahora sólo falta la parte del caballo. Yo creo que lo estoy haciendo al revés, pienso como un caballo y entreno como un abejorro jaja
Por cierto como serán los pulsómetros para caballos??

Nacho Cembellín dijo...

Y no mandaste la porra al psicologo ese de juguete. Manda huevos, no hay ninguna carrera que esté pensada para superdotados, es decir, gente que según los que miden el C.I., sobrepasan los 120 puntos. Además, es más importante la predisposición que la capacidad, capacidad que por otra parte es muy dificil medir auqnue se empeñen en contar lo contario. Mira que me cabrean a mi los agüereros de los cojones.
Ale, a darle duro pero sobretodo disfruta porque si disfrutas haciendo algo dificil será que no consigas tu proposito.

Carles Aguilar dijo...

Bien... buscando similitudes zoológicas quizás podemos encontrar algunas virtudes compartidas en algun amimal intermedio (en tamañoo y en capacidades..) No sé habrà que investigarlo.... Mientras tanto hay que seguir entrenando.. como un abejorro-caballo... O algo que se le parezca...

Xocas dijo...

Gracias Jesús Carlos. A ver si me acuerdo todo lo que debiera.

Atalanta, motivado estoy, pero metódico lo justo. Bastante testarudo, eso sí.

Risco, de nada, de nada. Al fin y al cabo, todos somos unos peludos descendientes del mono.

Furacán, los pulsómetros para caballos deben ser la caña, como ponerle las medias de compresión al equino.

Nacho, no le mandé a la porra. No acabo de entenderlo, pero en aquel entonces había una cierta psicosis con lo difícil que era la carrera (mucha tontería para darse importancia). Disfrutar es el objetivo número 1 (con un trabajo me llega).

Carles, en mi caso con el caracol, más grande que el abejorro, más pequeño que un caballo, lento, pero seguro.

Grimo runner dijo...

Muy buena entrada, de verdad y te lo dice un profesional asi que tiene más valor. Un abrazo.

Mildolores dijo...

Así me va.
Pienso como un mejillón y entreno como una marmota.
Intentaré mutar.

Xocas dijo...

Grimo, lo que eres es una fiera! ;-)

Mildo, a ver si hay suerte (y mucho trabaajo) y algún día me va como a ti.

Asier dijo...

Lo del psicologo de traca, siempre te dicen como tienes que vivir y como tienes que hacer las cosas pero no se preocupan de su propia vida.
Ale pues nada a entrenar como un caballo pensando como un abejorro.

Xocas dijo...

Sí, la verdad es que son profesiones en las que uno debe calcular mejor lo que dice. Menos mal que lo mío es precisamente pensar como un abejorro ;-)

German Carbajal dijo...

genial lo del abejorro. Estos cientificos no saben nada jeje!